Esta cifra, acreditada ante notario, corresponde a todo lo recogido desde las 15'00 h del viernes 7 de junio a las 15'00 h de ayer, viernes día 14, que supone el periodo de 7 días propuesto por la organización internacional Guinness World Records para recoger como mínimo 255 toneladas de alimentos no perecederos, y así alcanzar el "Largest Food Drive in one week", record sin precedentes anteriores, establecido especialmente para la ONG Mensajeros de la Paz.
Pero esta cifra de 277'5 toneladas va a
ser largamente superada, puesto que
todavía quedan por contabilizar todas las donaciones que de forma incesante
llegaron a la Plaza de España durante la tarde del viernes y la mañana de hoy
sábado. Se calcula que otras 15 toneladas más se sumarán a los resultados, y
que aunque no sean contabilizadas para el Guinness, servirán, como todas las
demás, para aliviar la situación de muchas familias españolas en estado de
necesidad
"Estoy abrumado del cariño y la
generosidad que cada día inunda la Plaza de España. Los ciudadanos están
actuando con el corazón y con la cabeza. Ójala que este ejemplo remueva las
conciencias de los que tiene el poder y la obligación de acabar con tantas
situaciones de necesidad en nuestro país", apuntó, exultante, el padre
Ángel, responsable de esta iniciativa, en la que una riada de solidaridad ha
llevado toneladas y toneladas de alimentos no perecederos para la campaña "Alimentando
Corazones", un ambicioso proyecto que busca paliar los efectos de la
crisis entre los más vulnerables de nuestra sociedad.
Esta iniciativa de recogida de alimentos, la
más grande del mundo, superó las 255 toneladas, que para ser inscrita en el
Guiness World Records debía ser completada en una semana. "Se trata de
un record sin precedentes anteriores", apuntó el sacerdote. Ha sido la
primera vez que la solidaridad se mide para un récord mundial. Y los españoles,
que nos estamos jugando los próximos Juegos Olímpicos, hemos batido la
plusmarca solidaria.
El récord está ahí, pero se hubiera
conseguido o no, ya se había alcanzado un hito más importante: el del fomento
de la ayuda mutua entre la ciudadanía. "Cuanto peor se pasa, más vemos
gestos de este tipo, que nos demuestran que la humanidad tiene solución, que entre
todos podemos cambiar las cosas", apuntó el sacerdote. Un "efecto
contagio" que ya está calando, y que ha conseguido que otras
iniciativas, que estaban apagándose, se reactivaran. Donaciones espontáneas de
ciudadanos a Cáritas y bancos de alimentos han arrastrado el impulso de
Mensajeros de la Paz.
Los alimentos recogidos están destinados
directamente a la Red de Recursos sociales anti-crisis de Mensajeros de la Paz
en toda España, donde además de los comedores sociales, se prestan ayudas
específicas a las más de 3.600 familias en "emergencia social",
distribuyendo entre ellas una completa cesta de la compra en función de las
necesidades y componentes de cada familia.
El Padre Angel, y todos los que han
intervenido en la organización de la campaña, se han conmovido con los numerosos
gestos de humanidad que se han visto en la Plaza de España de Madrid:
niños que han roto su hucha y han ido al supermercado a comprar alimentos
para colaborar, ancianos que han acudido en sillas de ruedas con lo que
podían cargar, y hasta una pareja de novios que han decidido llevar a
Plaza España el arroz que les deberían arrojar al salir de la iglesia.
Así mismo, más de 200 voluntarios han
estado atendiendo a las personas que llegaban a la plaza, recogiendo y
clasificando las donaciones, por turnos, desde las 10 de la mañana a las 10 de
la noche.
Aunque la mayor parte de las donaciones se
han realizado por particulares "kilo a kilo", también se ha recibido
el apoyo de empresas e instituciones. Para los que no puedan acercarse a
la Plaza de España, Mensajeros de la Paz ha abierto una cuenta para donativos:
SANTANDER 0049 5104 11 2016063667. También pueden realizarse donaciones on line
a través de la Web de la ONG www.mensajerosdelapaz.com. Todos estos donativos en
metálico serán destinados a la compra de alimentos para unirlos a la campaña.
FUENTE: MENSAJEROS DE LA PAZ
FUENTE: MENSAJEROS DE LA PAZ
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